Antonio de la Cruz y Martín

Nacimiento:

Fecha: 1761

Siglo: XVIII

Lugar: Vitigudino (Salamanca)

Fallecimiento:

Fecha: 1817

Siglo: XIX

Lugar: Desconocido

Logros profesionales:

Estudió en la Universidad de Salamanca, donde pasó a Ciudad Rodrigo para efectuar los estudios de su carrera comenzando a practicar en la farmacia de Francisco Javier Sierra, posteriormente se trasladó a Madrid para continuar sus estudios e ingresó de practicante en el Hospital General y de Pasión, siendo apadrinado por Patricio Martínez de Bustos, comisario general de Cruzadas en ese momento.

A la par que estudiaba se encargaba de las ocupaciones habituales en la farmacia del hospital y además haces tía a la cátedra de Física, que explicaba Chaveneau, la de Química, desempeñada por Pedro Gutiérrez Bueno Y la de botánica que explicaba Casimiro Gómez Ortega, estudios que le valieron para poder terminar pronto su carrera. Tras conseguir el título de farmacéutico opositó a la plaza de segundo boticario del Hospital General, plaza que consiguió y se sabe que llegó a la categoría de boticario mayor. Además Antonio de la Cruz prestó sus servicios en el ejército durante varios años. La primera noticia que se tiene de él como farmacéutico militar fue en la guerra del Rosellón.

En 1805 obtuvo una cátedra en el Colegio de Farmacia, creada para impartir los estudios a los futuros farmacéuticos. Esta cátedra se instaló provisionalmente en el Colegio de Farmacéuticos de Madrid y allí comenzó Cruz a dar las explicaciones, siendo este farmacéutico uno de los primeros catedráticos que tuvo la Facultad de Madrid.Durante la Guerra de la Independencia, desde 1808 hasta 1814, desempeñó interinamente el cargo de boticario mayor de los Hospitales Generales y de la Pasión.Fue el primero que explicó en la materia farmacéutica en el Colegio de San Fernando, de Madrid, en 1815, y tras jubilarse Pedro Gutiérrez Bueno ascendió y ocupó la plaza de catedrático más antiguo, Jefe Local del Colegio, por cuyo motivo, en Real Orden de 24 de enero de 1816, el rey le concedió los honores de boticario de su Real Cámara, según lo dispuesto en el artículo 4º, capítulo III, del reglamento interior de los Reales Colegios de Farmacia, aprobado el 6 de noviembre de 1804.
Escribió:»Tratado de los medios de desinfeccionar el aire, precaver el contagio y detener sus progresos, por L. B. Guyton (traducido)». Madrid: Imp. Real. 1803.

Bibliografía:

Roldán-Guerrero R. Diccionario biográfico y bibliográfico de autores farmacéuticos españoles. Edición facsímil. Madrid: Instituto de España. Real Academia Nacional de Farmacia, 2003. Vol. 1.