Los datos publicados por Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) coincidiendo con la celebración del Día Europeo de Concienciación sobre los Antibióticos muestran que, a pesar de la mejora en algunos ámbitos, la Unión Europea (UE) está avanzando hacia sus objetivos de resistencia antimicrobiana (RAM) para 2030.

Entre 2019 y 2023, el consumo de antibióticos en la UE aumentó un 1%, alejándose aún más del objetivo para 2030 de una reducción del 20% recomendada por el Consejo de la Unión Europea.

Aunque durante el mismo período se han producido reducciones significativas en las infecciones del torrente sanguíneo por Staphylococcus aureus resistente a la meticilina.

La situación en otras áreas críticas ha empeorado, como es el caso de las bacteriemias asociadas a Klebsiella pneumoniae resistente a carbapenemas, con un aumento de la incidencia en casi un 60% entre 2019 y 2023.

Esto representa una amenaza creciente para los pacientes en los hospitales de toda la UE, sobre todo porque siguen estando disponibles muy pocas opciones terapéuticas para tratar a los pacientes infectados con Klebsiella pneumoniae resistente a carbapenemas. 

Objetivos de la Unión Europea para combatir la resistencia a los antibióticos en 2030

Según el ECDC, para alcanzar los objetivos de la UE para 2030, se requiere una respuesta unida y urgente en toda la UE para evitar que las RAM socaven la asistencia sanitaria. Esta respuesta es clave para proteger a los pacientes y mantener la eficacia de los antibióticos para las generaciones futuras - dice la Dra. Pamela Rendi-Wagner, directora del ECDC.

Para subrayar la grave amenaza que supone este reto, el ECDC ha lanzado una serie de historias que tratan de dar voz a personas que han experimentado estancias hospitalarias prolongadas, recuperación incierta y tratamientos complejos debido a las resistencias. Las historias también hablan sobre el impacto que estas infecciones han tenido en las vidas de los pacientes y las familias.

Si bien algunos Estados miembros han hecho grandes progresos hacia sus objetivos recomendados, o incluso en algunos casos ya han alcanzado dichos objetivos, el panorama general muestra que se necesitan urgentemente intervenciones más específicas e intensificadas en toda la UE.

Acelerar los esfuerzos en tres áreas principales

Para cambiar el curso de la lucha contra las RAM, el ECDC está pidiendo acelerar los esfuerzos en tres áreas principales: prevención y control de infecciones, uso prudente y desarrollo de antimicrobianos,  así como acceso a nuevos antimicrobianos.

Las infecciones asociadas a la atención sanitaria representan el 70% de la carga sanitaria relacionada con las resistencias en la UE.

Por ello, los hospitales deben dar prioridad a las medidas básicas, pero críticas para la prevención y el control de infecciones, como:

  • Mejorar la higiene de las manos y facilitar el acceso a soluciones a base de alcohol para la desinfección de las manos.
  • Mayor cribado en la detección de bacterias resistentes para frenar la tendencia creciente en la neumonía producida por Klebsiella resistente al carbapenem.
  • Aumentar la capacidad de aislamiento de los pacientes positivos asegurándose de que hay suficientes habitaciones individuales.
  • Aumentar el número de personal dedicado a la prevención y control de las infecciones y la capacitación pertinente.

El sector comunitario representa el 90% del uso total de antibióticos en humanos.

La reducción del uso de antibióticos requiere más información y campañas de sensibilización del público, complementadas por intervenciones sociales y de comportamiento para evitar su uso innecesario.