El 18 de enero la Conferencia de Presidentes del Parlamento Europeo, formada por los líderes de cada grupo político y la presidenta del Parlamento, acordó, la creación de una nueva Subcomisión permanente de Salud Pública en el seno de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria (ENVI). Esto fue posible gracias al entendimiento de los tres grupos mayoritarios, el Partido Popular Europeo (PPE), el Grupo de Socialistas y Demócratas (S&D), y Renew Europe.

La nueva subcomisión estará vinculada a la Comisión ENVI, por lo que sus miembros serán elegidos entre sus componentes. Su creación se ha acordado tras concluir que esta comisión tiene demasiadas competencias y que los mandatos legislativos son demasiado extensos para tratar todos los temas en un solo órgano. De este modo habrá más espacio para debatir temas de salud en el Parlamento Europeo, aunque no tendría poder legislativo directo. Ahora los líderes de los grupos deberán llegar a un acuerdo sobre el mandato de la subcomisión y enviar un borrador al pleno del Parlamento para su votación final, prevista para el 2 de febrero.

La Salud Pública es una de las competencias de la Comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo (ENVI) - la mayor de la Cámara -, que se encarga principalmente de la política medioambiental, la legislación sobre salud pública y productos químicos y las cuestiones de seguridad alimentaria, incluida la legislación veterinaria. Desde mediados de periodo legislativo, los grupos políticos empezaron a expresar la opinión de que el ámbito es muy amplio para una sola comisión, teniendo en cuenta la mayor atención prestada a la importancia de la salud y los sistemas sanitarios tras la pandemia de COVID-19.

El pasado 24 de enero los eurodiputados mantuvieron un debate en sesión plenaria, en la que participó la comisaria de Salud y Seguridad Alimentaria, Stella Kyriakides, junto a representantes de la industria, y donde se trató el aumento de las infecciones respiratorias y la consecuente escasez de medicamentos en Europa, en particular de antibióticos y analgésicos pediátricos.

La comisaria indicó que los Estados miembro ya están poniendo en marcha medidas para mitigar esta situación, y que la Comisión y la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) están trabajando para hacer todo lo posible para reforzar el marco normativo, buscando aumentar la producción y prevenir la escasez. Por su parte, la ministra sueca de Asuntos Europeos, Jessika Roswall, explicó que la Presidencia sueca está comprometida a promover las medidas necesarias para paliar esta situación.

Los eurodiputados propusieron diversas iniciativas como trasladar la fabricación de medicamentos a Europa para reducir la dependencia de otros países, o armonizar la autorización de comercialización, actualmente descoordinada en los Estados miembro. Ante esto, Kyriakides señaló que la propuesta de revisión de la legislación farmacéutica europea, prevista para marzo, incluirá obligaciones más estrictas de suministro y mayor transparencia de las existencias.