Las pruebas de detección precoz en las farmacias comunitarias son cada vez más comunes, y ahora incluyen faringitis por estreptococo A, enfermedad celíaca, gripe, hepatitis C y VIH, además de pruebas más antiguas para la diabetes y el colesterol alto.
Estas son las conclusiones publicadas por la FIP este mes en "Pharmacy-based point-of-care testing: A global intelligence report".
La nueva publicación reúne datos procedentes de una revisión bibliográfica, los resultados de una encuesta realizada en 25 países -incluida España, con la participación del Consejo-, 11 estudios de casos y el debate de un grupo de expertos de la FIP, que ofrece una visión general de las intervenciones de pruebas en el punto de atención realizadas por farmacéuticos en todo el mundo.