El Consejo General de Colegios Farmacéuticos hace un llamamiento al Gobierno para que cuente con la profesión farmacéutica y con la red de más de 22.000 farmacias para favorecer el desarrollo de las políticas palanca del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, España Puede, presentado esta semana por el Gobierno.
En línea con la proactividad demostrada por la Farmacia a lo largo de la pandemia, el Consejo General vuelve a recordar las propuesta presentadas en la Comisión de Reconstrucción del Congreso de los Diputados para ampliar fortalecer y aumentar la capacidad del Sistema Nacional de Salud (SNS).
En este sentido, el pasado mes de octubre, la organización remitió al Ministerio de Sanidad un plan de acciones y posicionamiento en relación al Plan Nacional de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Asimismo, el Consejo General ha presentado también al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico una manifestación de interés sobre el proyecto atención sociosanitaria integral de las personas en áreas rurales o en despoblación. Propuestas que también han sido compartidas en encuentros con diferentes responsables de los Ministerios de Sanidad, Asuntos Económicos y Transformación Digital y Transición Ecológica y Reto Demográfico.
Acciones para fortalecer el SNS
El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia presentado por el Gobierno de España se estructura en diez políticas palancas y treinta componentes. Concretamente, la sexta política está enfocada a desarrollar un Pacto por la ciencia y la innovación y reforzar las capacidades del Sistema Nacional de Salud. En ella, el componente 18 - renovación y ampliación de las capacidades del Sistema Nacional de Salud (SNS) - propone un paquete con 6 líneas de inversión y 5 reformas.
En este contexto, las propuestas de la profesión farmacéutica pasan por potenciar la Atención Primaria y Comunitaria e incluir el impulso del desarrollo del papel asistencial y sanitario del farmacéutico, promoviendo los Servicios Profesionales Farmacéuticos Asistenciales desde la Farmacia Comunitaria.
En lo referente a consolidar la cohesión, equidad y universalidad del SNS, además de garantizar la urgente sostenibilidad de la farmacia rural, se apuesta por extender la colaboración de la Farmacia Comunitaria con la Farmacia Hospitalaria en la dispensación de medicamentos de diagnóstico hospitalario, así como la Atención Domiciliaria, servicios ambos que han demostrado su necesidad y utilidad para los pacientes durante la pandemia.
Asimismo, se propone también incluir herramientas como el Centro de Información sobre el Suministros de Medicamentos (CISMED), imprescindible para garantizar la continuidad de los tratamientos, y por la que precisamente esta semana el eurodiputado socialista Nicolás González Casares ha abogado en el Parlamento Europeo con el objetivo de crearla en el ámbito de la Unión para prevenir desabastecimientos.
En lo relacionado con la reforma de las políticas de Salud Pública, las más de 22.000 farmacias constituyen una estructura sanitaria con un amplio potencial en programas de cribado y protocolos de detección precoz, así como para reforzar otras acciones de prevención y promoción de la salud. Además, se propone incluir a los farmacéuticos y a la Farmacia Comunitaria en el Sistema de Vigilancia Epidemiológica Española a través de la creación de una Red Nacional de Farmacias Centinela de Salud Pública, como las que ya funcionan en varias autonomías.
Por último, dentro del proceso de digitalización de los servicios de salud, es necesario promover, aprovechando la tecnología, modelos de trabajo innovadores, colaborativos y eficientes, que garanticen la continuidad asistencial e integren a la Farmacia Comunitaria con el resto de profesionales sanitarios de Atención Primaria y Atención Especializada, disponiendo de un Historial Farmacoterapéutico completo y único.