“El número de farmacias disminuye cada vez más rápido, es dramático, pero desafortunadamente no es sorprendente. Los políticos deben detener urgentemente este declive”, ha declarado Gabriele Regina Overwiening, presidenta de la Cámara Federal de Farmacéuticos de Alemania (ABDA).

En Alemania, el número de farmacias descendió a 17.187 a finales de septiembre de 2024, lo que supone un descenso del 2,2% desde principios de año, con 384 cierres y sólo 36 nuevas aperturas, frente a las 48 de 2023, según un estudio de ABDA.

La presidenta de ABDA alerta de que cada farmacia que tiene que cerrar empeora el acceso para miles de pacientes porque las distancias se hacen más largas.

"Los políticos saben muy bien que el sistema farmacéutico ha estado crónicamente infrafinanciado durante años. Por lo tanto, la retribución de las farmacias, que ha estado estancada durante 11 años, debe ajustarse inmediatamente a la evolución económica general", ha apuntado Gabriele Regina Overwiening.

En este sentido, ha incidido en que, a un año de las próximas elecciones federales, la presión es cada vez mayor. "Las estructuras del suministro de medicamentos deben estabilizarse y fortalecerse”, ha añadido.

Además, la presidenta de ABDA ha recordado que hay muchas propuestas de futuro por parte de los farmacéuticos que también incluyen una mayor implicación de las farmacias en la atención primaria.

Sin embargo, ha apuntado, "lo que no conduce en absoluto al objetivo es el desmantelamiento de la farmacia, que, según los planes del Ministerio Federal de Salud, debe funcionar sin farmacéuticos. Para los pacientes, la atención debe ser garantizada por farmacéuticos que trabajen en el lugar".