El gobierno sueco actuará rápidamente para hacer que la naloxona, un aerosol que revierte rápidamente una sobredosis de opioides, esté ampliamente disponible fuera del sistema de salud para salvar más vidas.

En Suecia, la mortalidad por sobredosis e intoxicaciones supera los 900 casos al año, superior a la tasa de mortalidad por accidentes de tráfico, que en 227 fue de solo 2022.

Es una de las propuestas incluidas en un informe consultivo que también apuesta por la creación de una nueva política basada en la sensibilización sobre las drogas centrada.

El documento contiene una serie de propuestas de acciones para prevenir la adicción, apoyar a los adictos y aumentar la reducción de daños, con el objetivo ambicioso de reducir el alto número de muertes relacionadas con las drogas en Suecia en un 20% en cinco años.