La hepatitis es una inflamación del hígado que puede ser debida a diversas causas, aunque generalmente es un virus hepatotropo el responsable de la afección; también puede deberse a otras infecciones, sustancias tóxicas (alcohol, drogas, fármacos) o enfermedades autoinmunes. El cuadro clínico y las lesiones histológicas originadas por los distintos agentes etiológicos son prácticamente idénticos, aunque existen diferencias en el mecanismo de transmisión, el periodo de incubación y la evolución de la enfermedad y, sobre todo, en los marcadores serológicos que permiten conocer el agente responsable.