La xerostomía consiste en la sequedad de la mucosa bucal, generalmente como consecuencia de una disminución funcional o patológica de la producción de saliva. Se trata de un proceso que puede ser crónico o transitorio, y en ocasiones se puede complicar a otras patologías como caries dental o gingivitis. La xerostomía dificulta el habla y la deglución, provoca mal aliento y dificulta la higiene oral, debido a que el flujo de saliva ya no arrastra las bacterias. La secreción de saliva es continua, aunque existen estímulos que puede variar dicho proceso, tanto cualitativa como cuantitativamente. La importancia de la saliva radica en que interviene en funciones tan importantes como lubrificar y humedecer los labios y la mucosa bucal, elimina restos de comida ayudando a la higiene bucal, y participa también en labores digestivas y antimicrobianas. La prevalencia de la Xerostomía o sequedad de boca en la población general es de un 10% y parece existir una relación lineal con la edad, siendo mucho más frecuente entre las personas mayores que en los jóvenes.
Por el contrario, no parece haber diferencias apreciables entre sexos. Las principales causas que motivan Xerostomía son los medicamentos y ciertos tratamientos, además del síndrome de Sjogren. Algunos ejemplos de medicamentos que producen sequedad de boca son ciertos antidepresivos, antiinflamatorios y antiacnéicos. En ocasiones se produce también sequedad de boca tras un proceso de deshidratación o incluso debido al uso continuo de respiración exclusivamente bucal, que reseca la mucosa. El tratamiento de la Xerostomía con frecuencia sólo produce resultados parciales, los estimulantes de la saliva son poco efectivos y por ello se requiere recurrir a una serie de consejos prácticos. En primer lugar debemos restringir el consumo de café, refrescos con cafeína y bebidas alcohólicas. Además, debemos beber frecuentemente pequeños sorbos de agua a lo largo del día o incluso masticar pequeños trozos de hielo. Por último debemos cuidar nuestra higiene dental y efectuar visitas frecuentes al odontólogo. Masticar chicle también ayuda a segregar saliva, aunque debemos recordar que éstos tienen que ser sin azúcar para evitar el riesgo de caries dental.
La Xerostomía se puede tratar también con estimulantes de la saliva o con sustitutivos de saliva artificiales. Entre los estimulantes utilizados se encuentra el clorato potásico, que actúa como un agente irritante de las glándulas salivares. Recuerde que la sequedad de boca, también conocida como Xerostomía, es producida por el mal funcionamiento de las glándulas salivares, y que no debemos despreciar esta situación ya que la saliva interviene en multitud de importantes procesos digestivos e higiénicos entre otros. Puede estimular fácilmente la salivación mascando chicle y evitar la sequedad restringiendo el consumo de cafeína y alcohol.
No lo olvide: Pregunte siempre a su farmacéutico. Él le informará sobre éstas y otras cuestiones relacionadas. Y recuerde que la intervención farmacéutica supone una elevada garantía en el proceso global de adecuación, efectividad y seguridad de los tratamientos con medicamentos.